Sin ninguna controversia, el Sistema Nacional para Casos de Corrupción asumió las investigaciones a los ex gobernadores regionales Jorge Acurio Tito, del Cusco, y Wilfredo Oscorima Nuñez, de Ayacucho, por las declaraciones incriminatorias de los aspirantes a colaborador del caso Obrainsa e ICCGSA.
A diferencia de lo que sucede con el presidente Martín Vizcarra en su labor como gobernador regional de Moquegua, el Equipo Especial Lava Jato no ha considerado tener jurisdicción para investigar a estos gobernadores regionales, pese a que en el caso de Acurio hay una clara referencia a Odebrecht.
Según fuentes del Ministerio Público, en los casos de Acurio y Oscorima, el fiscal Germán Juárez Atoche remitió a las fiscalías especializadas en delitos de corrupción de funcionarios la transcripción de parte de las declaraciones de los colaboradores eficaces del caso Obrainsa, en las que hablan de los ex gobernadores regionales del Cusco y Ayacucho.
El fiscal Germán Juárez Atoche informó a las fiscalías anticorrupción las declaraciones de colaboradores eficaces del caso Obrainsa, que involucran a Acurio y Oscorima. Al derivar dichas declaraciones, el fiscal Juárez reconoce que no tiene jurisdicción para investigar a gobernadores regionales por actos ilícitos en obras que no tengan relación con Odebrecht o el “Club de la Construcción”.
Pese a lo cual insisten en retener la investigación al presidente Vizcarra por hechos no relacionados con el caso Lava Jato, generando una mayor incertidumbre de cómo los fiscales del Equipo Especial Lava Jato interpretan sus atribuciones, pues a simple vista lo que parece es que estarían escogiendo los casos por algún interés especial.
El fiscal superior coordinador Rafael Vela ha explicado en diversas entrevistas que asumieron la investigación al presidente Vizcarra al tratarse de colaboradores del caso del “Club de la Construcción”, por tanto, deberían asumir la investigación vinculada a todos los gobernadores regionales mencionados, y eso no está sucediendo.
El colaborador 10-2018 declaró que las constructoras Obrainsa y Concar realizaron dos pagos ilícitos por S/ 5,8 millones al exgobernador del Cusco Jorge Acurio, los años 2012 y 2013, para beneficiarse con los contratos de las redes viales del Cusco 1 y 3.