Fiorella Mollinelli presidenta de Essalud dice que ya no quedan camas UCI en Lima, Pilar Mazzetti ministra de Salud dice que si tenemos camas UCI y que apenas estas se llenan entonces se destinan más camas, mientras que la Defensoría del Pueblo revela que las camas UCI están ocupadas en un 99%, lo que sí no sabemos es en total de cuántas camas UCI disponemos a nivel nacional y si se adquirirán más y cuándo.
El reporte oficial de la Diresa Cusco dice que tenemos 23 camas UCI, así es, 23 camas para 1,300,000 habitantes, es decir una cama por casi cada 60,000 personas, aunque parezca mentira, tras 10 meses de pandemia, esa es nuestra capacidad hospitalaria.
Por otra parte médicos del hospital Regional dicen que ya no hay capacidad de camas UCI, mientras que desde la dirección de este hospital se dice que no hay problema con la cobertura de camas, finalmente el diario Gestión pública una declaración de Jean Paul Benavente en la que el gobernador regional afirma que tenemos 60 camas UCI equipadas con balones de oxígeno pero lo que falta es personal médico, sin embargo, tenemos información oficial de la Diresa a mediados de agosto del año pasado en la que se consigna para Cusco, solo 37 camas UCI. Conclusión: no tenemos la menor idea de nuestra capacidad hospitalaria y ninguna cifra ni declaración de nuestros médicos y autoridades coincide, es decir, estamos sin rumbo, como lo estuvimos siempre, desde que esta emergencia sanitaria empezó.
Mientras tanto por un muy buen tiempo vayamos olvidándonos de eso de la “redención turística” pues bajo las actuales condiciones y cifras, lo que se espera es que las restricciones se sigan endureciendo, así que amigos gurús del turismo y funcionarios obsesionados con esta actividad, es momento de reconocer que se equivocaron, que la tarea era fortalecer el sistema de salud y no abrir las puertas de Cusco de par en par.