Cluber Aliaga, ex Ministro del Interior -cinco días en el cargo- declaró en un medio que el pase al retiro de 18 generales fue apresurado y que iba a evaluarse, luego en la Comisión de Justicia, ensayó una justificación a las acciones policiales en la marcha de la Generación del Bicentenario, ¿Resultado? Un Ministro menos y el nombramiento del tercero.
Estamos ante una crisis policial, generada por el deceso de dos jóvenes en las marchas, sumemos la de Jorge Muñoz en Ica -dicen un disparo policial- bajo el gobierno de Sagasti -no se escucharon las voces de renuncia, ni se leyeron los post de Guzmán contra Sagasti, ¿Raro no?-, crisis aguda por el pase al retiro de generales para nombrar como nuevo comandante a César Cervantes -motivo por el que renunció también el primer ministro de esta cartera en la era Quijote-.
El Presidente ha declarado “No hay marcha atrás”, pese a que el Colegio de Abogados de Lima, Defensoría del Pueblo y expertos en dicha normativa, coinciden que es errado, inconstitucional, no respeta normas de nombramiento, pero igual “no hay marcha atrás” -quizás sea el título de algún nuevo poema presidencial- o recién vemos que hay defectos en el mandatario de transición como la terquedad.
Lo que hizo Cluber Aliaga, fue cual Kamikaze, reivindicar a su institución que atraviesa su peor momento, o acaso se quería que cuando declare critique a la institución que representa, eso no iba a pasar, y había que darse cuenta -solo por lógica- que al nombrar a un miembro de ellos no iba a obtener acciones que disminuyan el honor policial, lo logró con Rubén Vargas -su primer Ministro- y el desastre ocurrió con interpelación en camino frenado por la renuncia.
Ahora, designa como cabeza del interior a José Elice -Secretario General del Despacho Presidencial- profesional con mucha experiencia en temas parlamentarios pero con gran desconocimiento de la institución policial, debemos preguntarnos ¿Designar un Ministro alejado a ellos no agravará la crisis? Es un riesgo que asume el Ejecutivo, porque el descontento de la policía puede agravarse, y el tino en lo que se declare será determinante para perfilar el nuevo escenario.
Nadie puede negar que hubo excesos en la represión, pero hay errores en el Ejecutivo que aún se pueden corregir, la policía cumple un rol fundamental en la sociedad, o acaso señor Sagasti el Ministro del Interior ¿Será el hermano ausente en la cena pascual?. Mientras tanto hagan sus apuestas -cuánto durará Elice- 30 derecha 30 izquierda, que esta pelea es con navaja.