Por: Marian Manga
Se registra una denuncia contra el Estado peruano por los casos de esterilizaciones forzadas durante el gobierno de Alberto Fujimori, esta fue presentada ante el Comité para la Eliminación de la Discriminación Contra la Mujer (CEDAW), de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Los casos de María Elena Carbajal, F.L., R.L, E.R., y G.B., quienes fueron esterilizadas de manera forzada por agentes estatales en Lima y en comunidades de Huánuco y Huancavelica, en los años de 1996 y 1997, fundamentan la demanda presentada ante el CEDAW. Esta acción es patrocinada por la Organización Internacional Justicia y Reparación en alianza con la Asociación de Mujeres Peruanas Afectadas por Esterilizaciones Forzadas – AMPAEF.
Por primera vez los casos de esterilizaciones forzadas se presentan contra el Estado peruano ante dicha instancia de la ONU, que supervisa la aplicación de la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer. En los años 1995 y 2001, se realizaron esterilizaciones forzadas en el marco del Programa de Salud Reproductiva y Planificación Familiar, a cargo del Ministerio de Salud en el gobierno de Alberto Fujimori, este programa abuso de la situación de pobreza y vulnerabilidad de las víctimas.
Christian Brndt de Justicia y Reparación, declara que ninguna de las cinco victimas representadas ante el CEDAW, otorgo su consentimiento para ser esterilizada, al contrario fueron sometidas a este procedimiento por medio de engaño, presión y violencia; hasta ahora ellas sufren las consecuencias de estas prácticas forzadas como son la violencia psicológica y física, discriminación, abandono, pobreza, tienen problemas de salud, todos estos factores les han impedido concretar sus proyectos de vida.
En 24 años sus denuncias nunca fueron atendidas, la demanda solicita al Comité del CEDAW que declare la responsabilidad internacional del Estado peruano por la falta de reparación integral del daño ocasionado por las esterilizaciones forzadas a las víctimas, y por la falta de una investigación diligente de estos hechos. Son miles de mujeres que esperan justicia y reparación.